Un libro que me ayudó mucho en su momento y que es muy importante para beber la experiencia en primera persona de los hermanos que hicieron y hacen la espiritualidad de Nazaret en medio de nuestras calles....
Autor: Fraternidades de Carlos de Foucauld
Editorial: Benito Cassiers
Fecha de edición: 1ª Edic. Paulinas 1990.
Lugar: Santiago de Chile
Formato: 184 páginas. 11 x 18 cm.
Libro de divulgación que recoge nueve artículos de autores como Jorge Álvarez Calderón, Federico Carrasquilla, Gastón Garatea, Miguel Martel y el propio editor, Benito Cassiers, hermanito de Jesús, contando con una profunda presentación de Mons. Jorge Houston, a la sazón obispo auxiliar emérito de Santiago de Chile.
La obra, casi un florilegio de estilos y sensibilidades, hay que leerla desde el ambiente vital donde vio la luz y, en consecuencia, la América Latina se convierte en lugar teológico donde el grito de Dios se confunde con el grito de los pobres para anhelar la llegada del reinado de Dios y la ruptura de toda cadena opresora.
Tampoco hemos de olvidar que la primera publicación de este libro frisa los veinte años y han sido muchos los acontecimientos ocurridos en el planeta y algunos de gran calado como la caída del muro de Berlín y, por tanto, el derrumbe de ideologías que por un tiempo se confunden y entrelazan con el empeño en la construcción del reinado de Dios.
Aun así es hermoso constatar el amor de los autores a sus pueblos y a sus gentes y la opción sin reservas de los autores por la evangelización desde el calor de la casa de Nazaret.
CONTENIDO
Miguel Martel presenta a Carlos de Foucauld citando a la asamblea de Puebla en un intento de hacer notar la semejanza de la mencionada asamblea y las intuiciones del beato recogiendo en breve y atinada síntesis lo mejor de su espiritualidad.
Jorge Alvarez Calderón en dos capítulos presenta la vida de Nazaret en sus dos vertientes: identidad social de Jesús con su pueblo desde la vida oculta pasando del hecho evidente a una opción haciendo carne nazarena y, la consecuencia lógica para nosotros, la presentación de la Iglesia nazarena con la evidente repercusión para las fraternidades dedicando espacio de la reflexión a las fraternidades en América Latina.
Federico Carrasquilla nos ofrece una reflexión sobre Nazaret como encuentro y anuncio de Jesús, el modelo único, al que hemos de anunciar sin complejos con el testimonio de nuestra vida que tiene una opción clara por la Iglesia de los pobres tal como describe en un hermoso capítulo Gastón Garatea cuando nos habla del gusto de Dios por los pequeños.
Un bloque de cuatro capítulos lo ocupa el editor de la obra el hermanito Benito Cassiers con epígrafes muy interesantes tales como "una aventura desde lo cotidiano se vuelve acontecimiento", "testigos del reino", "vivir la Alianza" o "Padre, santificado sea tu nombre".
La lectura del libro nos aviva aquellos sentimientos que sembró en la Iglesia universal Juan XXIII con la convocatoria del II Concilio Vaticano y que tuvieron su plasmación concreta en las asambleas tan importantes para América Latina de Medellín y Puebla.